Fábricas
Nos regimos por los más altos estándares en cuanto a calidad y transparencia.
Una parte importante de nuestra estrategia empresarial consiste en el compromiso de establecer relaciones a largo plazo con un reducido número de socios clave. Esta medida nos permite crear relaciones más sólidas y estables, a la vez que nos ayuda a comprender a fondo el proceso completo de producción.
Hace varios años, también tomamos la decisión de abrir una oficina local más cerca de nuestras fábricas que nos permitiera colaborar más estrechamente con los proveedores y resolver las incidencias inmediatamente después de detectarlas.
Nos esforzamos por trabajar únicamente con las fábricas de mayor prestigio que podamos encontrar. Estas fábricas defienden nuestros principios básicos para garantizar que se cumplan las estrictas condiciones en cuanto a derechos humanos y principios medioambientales. Esto incluye garantizar que cada persona, en cada paso de nuestra cadena de suministro, reciba un trato justo y digno. En este sentido, hacemos todo lo posible para asegurar un entorno sin discriminación ni prejuicios para todos nuestros empleados y socios.
A efectos de avalar nuestra responsabilidad de principio a fin, contamos con un código de conducta al cual deben atenerse todas nuestras fábricas. Dicho código establece normas desde un primer momento y tiene por objeto que nuestros proveedores ofrezcan lugares de trabajo justos, seguros y no discriminatorios que no perjudiquen a los trabajadores, a la comunidad ni al medioambiente.
En 2020, decidimos dar un paso más en nuestra estrategia social de las fábricas donde producimos. Pedimos a nuestras fábricas principales que se unieran a la Sustainable Apparel Coalition (SAC) y completaran el Módulo Ambiental para Fábricas en la plataforma Higg. Con esto, podemos comprobar cada año que nuestras fábricas estén empleando los mejores procesos para crear nuestros zapatos en las mejores condiciones posibles. Además, podemos reforzar nuestro compromiso de apoyar a aquellos fabricantes que se rigen por los más altos estándares.
Mediante la plataforma Higg, podemos medir el rendimiento social y medioambiental de nuestras fábricas, siendo esto más eficaz que nuestras antiguas auditorías sociales. Actualmente, más del 85% de nuestra producción tiene lugar en fábricas que se han evaluado según el Módulo Ambiental para Fábricas de Higg; el resto lo evalúan auditorías sociales externas.
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